Actuar antes de que la queja se produzca
En todas las empresas se producen fallos a la hora de realizar servicios o a la hora de acometer su producción.
Como siempre lo mejor es atajarlo con prontitud, sin esperar que sea el cliente quien nos llame la atención.
Según comenta José Manuel Ruiz, de la empresa tecnológica Redesip, de gestión de grandes eventos, la mayoría de los fallos que se producen a la hora de acometer su trabajo son por causas ajenas.
Cuenta, que durante la celebración de un mundial, tuvieron que afrontar muchos momentos críticos ya que se requerían múltiples conexiones con diferentes países, lo que era de gran complejidad y además, debían soportar los efectos de los inhibidores que por seguridad llevan las personalidades que acuden al partido, y que dejaba sin servicio a las televisiones, periodistas y a la propia federación.
Para él, la solución pasa siempre, por estar en constante coordinación con las partes involucradas. Por eso sus técnicos hablan inglés para atender a cualquier afectado y permanecen en contacto con los equipos de seguridad para controlar la frecuencia de los inhibidores e informan de inmediato a los responsables de cada departamento.
Como ves la prontitud y la comunicación son la clave, siempre debes informar al cliente de la evolución de la incidencia y si llega el caso, compensarle por el daño causado.
Gracias por compartir esta información en redes sociales.
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